Según la doctrina católica, cada persona tiene un ángel guardián que los protegerá de daño y se asegurará de que conduzcan una buena vida. Esta oración es una forma de homenaje al trabajo que hace este ángel para el individuo. En la Biblia, se denominan tres espíritus guardianos: Gabriel, Raphael y Michael. La Iglesia alienta a sus miembros a que llamen a sus ángeles guardianes y los consideren modelos de roles tipo Cristo.
También se cree que los ángeles aparecen en la concepción y al parto. El catecismo católico dice que un ángel está con un niño de la infancia, mientras que San Jerónimo escribe que los ángeles vienen a la Tierra al nacer. Independientemente de la creencia que sostenga, sigue siendo sabio orar a su ángel guardián para protegerlo y mantenerlo en el camino correcto. Ya sea que creas en esto o no, esta oración es un paso importante hacia una vida mejor.
El catecismo católico afirma que los ángeles están presentes de la infancia hasta la muerte, y esto otorga credibilidad a la teoría de que los niños bautizados están protegidos por los ángeles. Además, la Iglesia enseña que cada humano tiene un ángel guardián, incluso si no lo saben. El catecismo católico declara explícitamente esto. Una oración al ángel guardián puede ser poderosa y transformadora, especialmente cuando se combina con otras devociones.
